Si, como yo, te has quedado encallado tratando de encontrar tu propósito, te dejo aquí otra idea que puede acercarte él. Te propongo que formules una primera declaración de propósito.
Para empezar, hazte las siguientes tres preguntas:
- ¿Cómo es tu mundo ideal?
- ¿A quién impactas, y cómo, en este mundo ideal?
- ¿Qué papel juegas en hacer del mundo un lugar mejor?